Tercera derrota consecutiva en Liga para el Granada.
Salió de inicio el Granada con una defensa con 3 centrales, Herrera y Milla en el medio campo y Molina en punta. Quini, que volvía a la convocatoria tras 2 meses de baja por lesión, saltó desde el banquillo para jugar el último cuarto de hora.
El Celta arrancó el encuentro tomando la iniciativa ofensiva, imprimiendo un ritmo vertiginoso y siendo claramente superior durante la primera hora de juego. Producto de dicha superioridad, generó acciones de peligro desde los primeros compases. Aspas fue el jugador más destacado del equipo vigués sirviendo a sus compañeros pases de gol. El primer aviso llegó con un balón que Aspas metía entre los centrales para que Santi Mina finalizara, pero Rui Silva le salió tapando su disparo. Poco después, Aspas no encontró espacio en el área para disparar, pero sacó un pase a Nolito que la mandó alta. En una tercera ocasión clara, de nuevo el delantero gallego asistía a Hugo Mallo que remató obligando a intervenir de nuevo a un Rui Silva que fue el mejor de los rojiblancos en la primera mitad, realizando paradas de mérito.
Tras una nueva ocasión para el conjunto celtiña, con un disparo lejano de Olaza que repelió el cancerbero rojiblanco, el Granada salió a la contra convirtiendo su primer tiro a puerta en el 0-1, obra de Luis Suárez que levantó el balón superando al portero. El Celta respondió inmediatamente igualando el marcador con un centro raso desde la izquierda que Nolito remató a gol. Brais Méndez tuvo su ocasión con un golpeo desde la frontal buscando la escuadra, pero Rui Silva intervino de nuevo.
En los últimos minutos del primer acto, el Granada dio un paso adelante y tuvo opciones para haber hecho su segundo tanto. Primero, con una doble ocasión en la que Machís puso la bola en el punto de penalti para Neva, su remate lo rechazó el portero y Molina (en posición de fuera de juego) recogió el rebote y la envió alta. Y luego, con un lanzamiento de Milla que se fue desviado.
Con la reanudación llegó el primer cambio en las filas del conjunto nazarí con la entrada de Puertas por Molina, cuyo lugar como referencia en ataque lo pasó a ocupar Suárez, que más tarde sería sustituido por Soldado. Este segundo tiempo se inició con un ritmo inferior y, pese a que el Celta seguía teniendo más el balón, el Granada no parecía pasar tantos apuros. Sin embargo, las ocasiones siguieron llegando por el lado celeste. Hugo Mallo enviaba de cabeza al área chica donde el remate forzado de Santi Mina se fue alto. Tapia también envió alto otro remate a centro de Nolito, y el propio jugador gaditano remató mal un centro de Aspas que se le fue pegado al palo.
Tanto fue el cántaro a la fuente que al final el equipo vigués acabó resolviendo el partido en cuatro minutos con dos tantos decisivos. El primero de ellos del recién incorporado Baeza, tras varios rebotes en el área chica; y el definitivo 3-1 en una jugada en la que Aspas salva la salida de Rui Silva, su centro raso se pasea por delante de la portería y Beltrán remata en el segundo palo. Los minutos de tiempo añadido se perdieron en trifulcas que acabaron con varias cartulinas amarillas y una roja directa al jugador del Celta, Okay.
Ficha técnica:
RC Celta de Vigo: Rubén Blanco; Hugo Mallo, Araújo, Murillo, Olaza; Tapia; Brais Méndez (Aidoo, min.92), Denis Suárez (Okay, min.74), Nolito (Miguel Baeza, min.74); Aspas, Santi Mina (Beltrán, min.83).
Granada CF: Rui Silva; Foulquier (Quini, min.76), Domingos Duarte, Germán, Vallejo (Soro, min.82), Carlos Neva; Yangel Herrera (Gonalons, min.60), Luis Milla; Machís, Luis Suárez (Soldado, min.60) y Jorge Molina (Antonio Puertas, min.46).
Árbitro: Díaz de Mera Escuderos (comité castellanomanchego).
Goles: 0-1, min.25: Luis Suárez; 1-1, min.27: Nolito; 2-1, min.81: Miguel Baeza; 3-1, min.85: Beltrán.
Tarjetas amarillas:
RC Celta de Vigo: Murillo, Tapia, Olaza, y Hugo Mallo.
Granada CF: Foulquier, Diego Martínez (técnico), Puertas y Soldado .
Tarjetas rojas:
RC Celta de Vigo: Okay.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 11, disputado en el estadio Abanca Balaídos, a puerta cerrada.
